Maurice Maeterlinck, premio Nobel de Literatura, vuelve a hacer gala de su interés entomológico y decide observar el minúsculo universo de estos prodigiosos insectos con la convicción de que encierra innombrables misterios pero que, a la vez, puede despertar un sinfín de analogías con el comportamiento humano. Las hormigas se nos muestran en este libro como seres capaces de extraordinarias proezas. Como el hombre, también ellas cuentan con ejércitos organizados, algunas se han especializado en una suerte de ganadería y otras parecen haber aprendido a cultivar sus alimentos. Su sistema de comunicación también despierta el asombro, y nos recuerda a la telepatía
La Vida De Las Hormigas | Maurice Maeterlinck
97895885445123
$ 30.000
Impuestos incluidos
Maurice Maeterlinck, premio Nobel de Literatura, vuelve a hacer gala de su interés entomológico y decide observar el minúsculo universo de estos prodigiosos insectos con la convicción de que encierra innombrables misterios pero que, a la vez, puede despertar un sinfín de analogías con el comportamiento humano. Las hormigas se nos muestran en este libro como seres capaces de extraordinarias proezas. Como el hombre, también ellas cuentan con ejércitos organizados, algunas se han especializado en una suerte de ganadería y otras parecen haber aprendido a cultivar sus alimentos. Su sistema de comunicación también despierta el asombro, y nos recuerda a la telepatía
Maurice Maeterlinck, premio Nobel de Literatura, vuelve a hacer gala de su interés entomológico y decide observar el minúsculo universo de estos prodigiosos insectos con la convicción de que encierra innombrables misterios pero que, a la vez, puede despertar un sinfín de analogías con el comportamiento humano. Las hormigas se nos muestran en este libro como seres capaces de extraordinarias proezas. Como el hombre, también ellas cuentan con ejércitos organizados, algunas se han especializado en una suerte de ganadería y otras parecen haber aprendido a cultivar sus alimentos. Su sistema de comunicación también despierta el asombro, y nos recuerda a la telepatía