9788416126699
Pomelo aprenderá que los vínculos no son fáciles y que hay ratos para jugar con alguien y otros en los que hay que estar solos, que cada uno tiene un espacio propio, a veces inaccesible para el otro... Y sobre todo aprenderá una gran lección: Hay que disfrutar de cada instante porque en todos hay un tesoro y también hay que reconocer y valorar los tesoros que cada uno lleva dentro de sí. Los niños son grandes filósofos.